Osos de anteojos

Osos de anteojos

Los Osos de anteojos (Tremarctos ornatus), también conocidos como “osos andinos”, se distribuyen en las montañas del norte de los Andes, en países como Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Chile. Este especie de oso es nativa de América del Sur y constituye el pariente vivo más cercano de los osos de cara corta que habitaron el planeta entre el Pleistoceno Medio y el Tardío.

El oso de anteojos es además una de las especies de osos más amenazadas del mundo, aunque no al extremo del oso panda gigante, que es su más cercano pariente entre las especies vivas.

Las hembras de anteojos son llamadas a menudo “vacas”, los machos “verracos” y los jóvenes “cachorros”.

Osos andinos

Descripción

Los osos de anteojos son generalmente los osos más pequeños de la familia Ursidae. Los machos de la especie son significativamente más grandes que las hembras, cerca de un 33 por ciento. Crecen más de cinco pies (1,5 metros) de largo y pueden pesar hasta 340 libras (154 kilogramos). Las hembras por su parte rara vez pesan más de 180 libras (82 kilogramos).

Estos animales son llamados “Osos de anteojos” debido a los grandes círculos blancos o semicírculos de piel blanca que presentan alrededor de sus ojos, lo cual da la apariencia estar llevando espejuelos. Tienen igualmente un pelaje hirsuto, negro y con marcas de color amarillento, a veces de color rojo, en la cara y la parte superior del pecho.

Debido al clima cálido en el que viven, la piel de estos osos es razonablemente más delgada que la de la mayoría de otras especies de osos. Asimismo, mientras los demás tipos de osos tienen 14 pares de costillas, el de anteojos tiene sólo 13. Otra diferencia notable es que los osos que nos ocupan no se ven necesitados de hibernar, a diferencia de las otras especies conocidas.

Las garras de los osos de anteojos son largas, curvadas y afiladas, lo cual permite que sean usadas efectivamente por el animal para la escalada y para cavar en busca de alimentos, como los osos hormigueros y termiteros.

Sus extremidades anteriores son más largas que sus piernas traseras, lo que le ayuda a trepar a los árboles más fácilmente. Sus mandíbulas además son muy fuertes, de molares anchos y planos para ayudarles a masticar incluso vegetación dura, como la corteza de árboles.

Hábitat

Los osos de anteojos prefieren hábitats como los bosques tropicales de montaña y los pastizales alpinos. Viven principalmente en el exuberante follaje de los bosques de altura, ubicados en las laderas de las montañas de los Andes, a alturas tan elevadas como los 14 mil pies (cuatro mil 300 metros).

Estos osos bajan de las montañas sólo en búsqueda de comida, de ahí que hayan sido avistados en desiertos costeros y estepas.

Con respecto al hábitat, es importante destacar que la especie es más numerosa en el lado oriental de los Andes, donde son menos vulnerables a la colonización humana.

Tremarctos ornatus

Dieta

Los osos de anteojos son principalmente herbívoros, pero en general se clasifican como omnívoros.

Viajan principalmente a través de los bosques para la recogida de fruta madura, bayas, cactus y miel. Durante los períodos en que la fruta madura no está disponible, también se alimentan de corazones de bambú, maíz y epifitas, unas plantas que crecen sobre otras plantas llamadas bromelias.

De vez en cuando, estos osos van a complementar su dieta con insectos, roedores y aves, aunque en promedio, sólo alrededor del siete por ciento de su dieta es carnívora.

Comportamiento

Los osos de anteojos son nocturnos, lo que significa que son principalmente activos durante la noche, sobre todo durante las horas del crepúsculo. En el día, se refugian en cuevas, así como en las raíces o troncos de los árboles.

Son criaturas arbóreas y escaladores expertos, de ahí que gasten una gran cantidad de tiempo alimentándose en los árboles. Su supervivencia depende en gran medida de la capacidad de escalar hasta los árboles más altos de los bosques de los Andes.

Una vez que los osos están en los árboles, a menudo construyen plataformas a partir de ramas rotas, como vía para llegar a más comida.

Esta especie no es muy territorial, pero sus ejemplares tienden a aislarse entre ellos, con el fin de evitar la competencia. Si se encuentran con otros osos e incluso un ser humano, reaccionan de una manera dócil pero prudente. No obstante, atacan si se sienten amenazados o una madre percibe que sus cachorros están en peligro, tal y como hacen otros osos, ya que este animal, sea la especie que sea, es muy protector con sus crías.

Los osos de anteojos también son animales solitarios y normalmente sólo se ven juntos durante la temporada de apareamiento. Debido a ese carácter solitario, los individuos de la especie suelen ser criaturas muy silenciosas y sólo cuando se encuentran con otro oso es que ejecutan vocalizaciones.

Oso frontino sudamericano

Reproducción

Siendo una especie tropical de oso, la reproducción de los de anteojos tiene lugar durante todo el año, pero sobre todo de abril a junio. Los ejemplares alcanzan la madurez y comienzan a reproducirse entre la edad de cuatro y siete años.

La hembra puede dar a luz a uno o dos cachorros cada dos o tres años y el período de gestación es entre seis y siete meses.

Las parejas reproductoras permanecen juntas durante unas semanas después de que ocurre el apareamiento. La hembra es capaz de planificar su embarazo y el parto, para asegurarse de que el nacimiento se produzca unos 90 días antes del pico de la temporada de la fruta, de modo que haya abundancia de suministros alimenticios. Si se produjese una temporada donde los suministros de alimentos son escasos, el oso hembra puede retrasar la implantación mediante la que los embriones pueden ser absorbidos por el cuerpo de la madre, de forma que no de a luz ese año.

Una hembra en estado además construye una guarida antes de dar a luz.

Los cachorros de la especie pesan entre 10 y 18 onzas al nacer y sus ojos permanecen cerrados durante el primer mes de vida. Los cachorros además permanecen con su madre durante al menos dos años, montando en su espalda cuando son pequeños, práctica a la que se ven obligados a renunciar tras ser ahuyentados por los machos adultos que tratan de aparearse con la hembra madre.

La esperanza de vida de un oso de anteojos puede ser de 25 años en el medio silvestre y 36 en cautiverio.

Estado de Conservación

Esta especie se enumera como vulnerable en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Mundial para la Naturaleza, dado que su población está amenazada por una serie de razones.

Los osos de anteojos son cazados por los humanos locales, que creen que estos animales constituyen una amenaza para el ganado, desconociendo que realmente no comen grandes cantidades de carne. De igual forma, la agricultura extensiva y la tala han dado lugar a la pérdida de hábitat de la especie.

La vesícula biliar de los osos de anteojos se valora en las prácticas medicinales orientales, por lo que son cazados para este fin también.

Algunas estimaciones sugieren que sólo hay alrededor de tres mil ejemplares de esta especie en el mundo silvestre.

Compártelo en tu red social: